Como una actividad académica interdisciplinaria entre la Facultad de Psicología y la Escuela de Artes Visuales de la Universidad de Colima, se realizó la conferencia-taller “Los usos del cuerpo como recurso de expresión en las artes visuales”, a cargo de Sandra Uribe Alvarado, artista plástica y profesora de la Escuela de Artes visuales de esta casa de estudio, en el campus central de esta casa de estudios.

La idea de las organizadoras de este ejercicio, Nancy Molina Rodríguez, profesora de la Facultad de Psicología y Sandra Uribe, fue que los estudiantes se dieran cuenta que existen varias similitudes en áreas y temas que abordan ambas carreras y que éstas se complementan de alguna manera.

“Muchas veces –dijo Sandra– creemos que la profesión artística está desvinculada de todas las áreas de formación, cuando en realidad en el ejercicio constante nos damos cuenta que la producción del arte está relacionada con las ciencias sociales y las exactas”.

Un ejemplo de esto, dijo Nancy Molina en entrevista, son las nuevas teorías Queer que se abordan desde la perspectiva de estas dos profesiones y que han venido a modificar la concepción del cuerpo y la expresión de la identidad. Esto último se ve reflejado, coincidieron, tanto en las formas de ser, sentir, pensar y actuar del ser humano, como en el surgimiento de nuevas corrientes artísticas.

En ese sentido, reconoció Nancy, tanto los artistas como los psicólogos tienen una sensibilidad complementaria ante los constantes cambios sociales de los últimos tiempos.

Para Sandra Uribe, los artistas son quienes logran expresar, criticar y visibilizar dichos cambios, mientras que para Nancy Molina, los psicólogos son quienes estudian esos cambios para atender cualquier afectación en la conducta del ser humano.

De acuerdo con Nancy, este proyecto busca que los alumnos de ambas carreras “puedan trabajar de manera pertinente en contextos de constante cambio”.

El reto del taller, dijo Uribe Alvarado, fue que juntos, alumnos de psicología y de artes visuales dibujaran y pintaran un cuerpo humano que llevara a la reflexión de la cambiante realidad contemporánea.

“En este trabajo, tanto del punto de vista psicológico como artístico –concluyó Sandra– rescatamos el hecho de que el cuerpo humano es un recurso de expresión con el que de alguna manera buscamos generar una comunicación más abierta y profunda con el otro, construyendo un sentido distinto de la realidad”.